Sistemas de seguridad con Inteligencia Artificial

Si en un post anterior os hablábamos de una empresa israelí que ha desarrollado un software para la detección de movimientos asociados a crímenes o hurtos, hoy os queremos hablar de otras aplicaciones de la IA que se están perfeccionando para la posible adopción de programas de vigilancia masivos.

Porque aunque os parezca algo de ciencia ficción, este tipo de tecnología ha venido para quedarse, y cerca de la mitad de países del mundo ya la usa sistemas inteligentes, en concreto en el reconocimiento facial. Según un informe del Fondo Carnegie para la Paz Internacional, unos 75 países utilizan la IA para vigilar a sus ciudadanos, entre ellos España. Como dato interesante os diremos que por estar ligado a control de la población más que a su vigilancia, el reconocimiento facial ha sido prohibido en California.

Nuevas tecnologías con IA.

Como ya os hemos dicho, el reconocimiento facial no es el único campo de desarrollo para la identificación de las personas. La IA se está aplicando en otros estudios y tipos de tecnología que permitirán diferenciar a individuos. Si todas llegan a aplicarse de alguna manera, ¿estaremos ante vigilancia o control de la población? Este es un debate que ya se está dando en múltiples sectores de la sociedad.

Reconocimiento por la forma de andar.

Watrix, una compañía china, está trabajando en un software que es capaz de reconocer a un ser humano por su forma de andar. A través de secuencias de vídeo analiza la longitud de la zancada y el ángulo de los brazos. La compañía afirma que tiene una precisión del 94% y el gobierno del país ya usa esta herramienta para controlar a sus ciudadanos.

En EE.UU. el Pentágono está probando otro software que también analiza la forma de andar, pero esta vez a través del uso del smartphone. El teléfono podría identificar quién es la persona que lo porta por su manera de caminar.

Reconocimiento por el latido del corazón.

El Pentágono ha encargado un dispositivo que reconoce a las personas mediante un láser que detecta el movimiento superficial ocasionado por el latido del corazón. Esta herramienta puede identificar a un individuo por su “firma cardiaca”.

¿No os parece absolutamente increíble?

Reconocimiento por la detección de células microbianas.

Parece muy de ciencia ficción, pero es un estudio que se está llevando a cabo. Las personas emitimos constantemente bacterias que viven en nuestro cuerpo y que podrían usarse para identificarnos con una fiabilidad del 80%.

Reconocimiento de las nalgas.

En Japón, han desarrollado un asiento de coche que permite el reconocimiento de las personas por su peso y la forma de sus nalgas y parte trasera del cuerpo. Esta tecnología podría usarse para evitar el robo de coches, y aunque no está comercializada nos abre los ojos hacia la rápida y asombrosa evolución de las múltiples aplicaciones de la IA.


Como vemos, la IA se va desarrollando a velocidades de vértigo y permite innumerables aplicaciones en el campo de seguridad y sistemas de vigilancia, entre otros.

Todas estas nuevas realidades plantean muchos debates sobre su utilización y sobre los derechos de privacidad de las personas. Como hemos visto también, no solo son usadas por empresas privadas, sino también por agencias de seguridad de diferentes gobiernos de todo el mundo.

¿Os imagináis qué nivel de vigilancia permitirá toda esta tecnología? Por eso se plantea una disyuntiva: ¿se trata de seguridad o de control?. El debate está abierto.